Conocimiento Directo: Características y ejemplos

El conocimiento directo es uno de los tipos de saberes que existen, sin embargo, poco habla sobre este, pero es uno de los más importantes, debido a que, si no se pasa por éste, no se podrían describir o mencionar las características de lo que tenemos a nuestro alrededor. Por eso, te invitamos a conocer qué es, sus características y ejemplos.

¿Qué es el conocimiento directo?

Es aquel que se obtiene de la primera impresión, del primer contacto con las cosas. Por eso también se le llama saber de familiaridad, ya que, después que tenemos un primer contacto con una persona o haber vivido una experiencia; si nos vuelve a suceder lo recordaremos, lo que se llama conocimiento directo.

No es provocado, se da de forma imprevista e involuntaria. Algunos autores también suelen llamarlo “intuición”, debido a que la persona que vive la experiencia o el encuentro con lo que desconoce intenta descubrir qué es y lo identifica según lo que le parece.

Ahora bien, a diferencia del intuitivo, es un saber objetivo porque en su apreciación no está incluida la experiencia, es decir, no existe contacto anterior que le permita a la persona definir claramente y dar nombre.

No existe un conocimiento directo si no se tiene contacto con la persona u objeto que origina este saber, solo se puede dar cuando comprobamos con nuestros propios ojos que algo existe, que es real.

características del conocimiento directo

Características del conocimiento directo

Entre las características del conocimiento directo más destacadas podemos mencionar las siguientes:

  • No se adquiere de forma individual, se necesita de un objeto u otra persona para que este ocurra.
  • Es experiencial, lo que quiere decir que la persona debe vivir el momento de conocer, percibir a través de los sentidos el objeto del saber.
  • Se puede verificar, debido a que es algo que existe.
  • Es simple, no va más allá de los sentidos (lo que se siente, ve, escucha, percibe).
  • El saber adquirido es preciso, lo que da paso luego al conocimiento por descripción.
  • No es un conocimiento empírico, se origina antes de éste.

Ejemplos del conocimiento directo

Como ejemplo, imaginemos que naufragamos y llegamos a una isla desierta, donde encontramos una nueva planta con frutos apetitosos a la vista, la miramos, olemos y probamos, ahí estaremos creando un saber directo o familiar de esa planta que no conocíamos.

Otro ejemplo más adaptado a la realidad, sería cuando nos servimos café caliente, donde solo con tocar la taza sabemos la temperatura a la que está y si está muy caliente, esperamos para beber.

Referencias Bibliográficas:

Echeverria, J. (1998). Filosofía de la ciencia. 2da. Edición. Ediciones Akal S.A. Madrid, España.

Tomasini, A. (2001). Teoría del conocimiento clásica y epistemología Wittgensteiniana. Primera edición. Editorial Plaza y Valdés. México, México.

Deja un comentario